Un safari más allá de Yangana


s en estas latitudes que en el colmo de mi nostalgia me invade la loca idea de proponer a Rosita que me venga a acompañar y fuera de mí, no vacilo en escribirle y en toda la regla, que debe estar a mi lado ...insulso de mí que cuando recibí sus letras, en las que me decía que estaba dispuesta a satisfacer mi exigencia, se me prendió la lámpara del buen sentido y que en mi necio egoísmo iba a sacrificar a la persona que más he amado en el mundo y pude rectificar a tiempo mi irresponsable idea, fruto de una mente invadida por los calores de un clima, que cuando no inundaba de lluvia los caminos, encendía un infierno, en mentes calenturientas como la mía en esos momentos.

uff... Qué cosas más estúpidas que se le ocurren a uno.